El cantante boricua se presentó en cancha de Sarmiento de esa ciudad ante miles de fans que disfrutaton del show bajo una lluvia permanente que no pudo frenar el delirio de verlo cantar y bailar con su energía habitual. DiarioPergamino.com estuvo allí y te lo cuenta.
Exactamente a las 21:57 Chayanne subió al escenario y provocó el griterío incontenible de cientos y cientos de mujeres que, desafiando al mal tiempo imperante durante toda la jornada del viernes, llegaron al estadio del "verde juninense" para verlo ahí nomás, tan cerca como nunca lo hubieran imaginado. Con "Provócame", el primer gran hit del boricua, comenzó la fiesta al mismo tiempo que se desencadenaba una pertinaz lluvia que duró todo el tiempo en que se extendió el recital.
Una a una iban a ir sucediéndose las canciones que Elmer Figueroa (tal es su verdadero nombre) iba a ir desparramando sobre el escenario. Éxitos como "Lo dejaría todo", "Si nos quedara poco tiempo", "Me enamoré de ti" y tantos otros, surgían desde su figura y la compañía inagotable de su público fiel, femenino casi en su totalidad, que pese a la insistente lluvia se deshacía en coros, aplausos, gritos de felicidad y alguna que otra lágrima por tenerlo casi al alcance de la mano. Del mismo modo acompañaron ellas cada canción, tanto clásica como más reciente (por ejemplo con "Siento", su último hit), y hasta tuvieron tiempo de recordar con nostalgia algún extracto de temas como "Tiempo de vals".
Un correcto acompañamiento musical y bailarines que lo acompañaban moviendo caderas al ritmo de los hits movidos, fueron un punto alto en la noche juninense. El escenario, montado también bajo la lluvia del viernes y que por momentos hacía prever alguna posibilidad de suspensión, estuvo acorde al espectáculo, con iluminación multicolor, pantallas gigantes a ambos lados y los tradicionales efectos especiales. Es anecdótico además que una de las bailarinas del staff de Chayanne tuvo un resbalón que supo manejar con pericia, ya que también otros bailarines y algunos de los músicos de la banda sufrieron los efectos de un piso mojado y resbaladizo que sortearon con dificultad pero con éxito.
Chayanne agradecía a la multitud que fue a verlo, especialmente por tener la paciencia y la garra de estar a la intemperie mojándose pero logrando a cambio disfrutar del show. El público retribuía como diciendo "gracias a vos por darnos el recital". Hubo una perfecta comunión entre las damas y el cantante, ya que con su humildad habitual él aceptó hacer el show aún en esas condiciones climáticas tan adversas. Y se notaba que el propio Chayanne disfrutaba de cantar cada hit, de bailar y hacer suspirar a su gente, de hacer gestos cómplices que generaban emoción en las mujeres presentes. Una hora y media de pura adrenalina para el público que seguía minuto a minuto cada interpretación de uno de los artistas latinos más convocantes.
Alrededor de las 23:30 llegó el final del espectáculo. Chayanne eligió "Torero" para despedirse bien arriba, con toda su energía y para levantar en masa a quienes estaban en el estadio.
Así dejó el escenario, así cerró una actuación que será largamente recordada, así pasó Chayanne por Junín, revolucionando a la vecina ciudad y gente de toda la región que viajó especialmente a verlo, escucharlo, sentirlo. Y ellas, sus fieles seguidoras, se fueron felices. Él se llevó el recuerdo de cada una para tenerla "sentada aquí en mi alma".
Exactamente a las 21:57 Chayanne subió al escenario y provocó el griterío incontenible de cientos y cientos de mujeres que, desafiando al mal tiempo imperante durante toda la jornada del viernes, llegaron al estadio del "verde juninense" para verlo ahí nomás, tan cerca como nunca lo hubieran imaginado. Con "Provócame", el primer gran hit del boricua, comenzó la fiesta al mismo tiempo que se desencadenaba una pertinaz lluvia que duró todo el tiempo en que se extendió el recital.
Una a una iban a ir sucediéndose las canciones que Elmer Figueroa (tal es su verdadero nombre) iba a ir desparramando sobre el escenario. Éxitos como "Lo dejaría todo", "Si nos quedara poco tiempo", "Me enamoré de ti" y tantos otros, surgían desde su figura y la compañía inagotable de su público fiel, femenino casi en su totalidad, que pese a la insistente lluvia se deshacía en coros, aplausos, gritos de felicidad y alguna que otra lágrima por tenerlo casi al alcance de la mano. Del mismo modo acompañaron ellas cada canción, tanto clásica como más reciente (por ejemplo con "Siento", su último hit), y hasta tuvieron tiempo de recordar con nostalgia algún extracto de temas como "Tiempo de vals".
Un correcto acompañamiento musical y bailarines que lo acompañaban moviendo caderas al ritmo de los hits movidos, fueron un punto alto en la noche juninense. El escenario, montado también bajo la lluvia del viernes y que por momentos hacía prever alguna posibilidad de suspensión, estuvo acorde al espectáculo, con iluminación multicolor, pantallas gigantes a ambos lados y los tradicionales efectos especiales. Es anecdótico además que una de las bailarinas del staff de Chayanne tuvo un resbalón que supo manejar con pericia, ya que también otros bailarines y algunos de los músicos de la banda sufrieron los efectos de un piso mojado y resbaladizo que sortearon con dificultad pero con éxito.
Chayanne agradecía a la multitud que fue a verlo, especialmente por tener la paciencia y la garra de estar a la intemperie mojándose pero logrando a cambio disfrutar del show. El público retribuía como diciendo "gracias a vos por darnos el recital". Hubo una perfecta comunión entre las damas y el cantante, ya que con su humildad habitual él aceptó hacer el show aún en esas condiciones climáticas tan adversas. Y se notaba que el propio Chayanne disfrutaba de cantar cada hit, de bailar y hacer suspirar a su gente, de hacer gestos cómplices que generaban emoción en las mujeres presentes. Una hora y media de pura adrenalina para el público que seguía minuto a minuto cada interpretación de uno de los artistas latinos más convocantes.
Alrededor de las 23:30 llegó el final del espectáculo. Chayanne eligió "Torero" para despedirse bien arriba, con toda su energía y para levantar en masa a quienes estaban en el estadio.
Así dejó el escenario, así cerró una actuación que será largamente recordada, así pasó Chayanne por Junín, revolucionando a la vecina ciudad y gente de toda la región que viajó especialmente a verlo, escucharlo, sentirlo. Y ellas, sus fieles seguidoras, se fueron felices. Él se llevó el recuerdo de cada una para tenerla "sentada aquí en mi alma".
No hay comentarios:
Publicar un comentario